La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) ha reafirmado su compromiso con la construcción del embalse de Río Indio, destacando la importancia de alcanzar un consenso con las comunidades locales antes de iniciar el proyecto. Este embalse es considerado esencial para garantizar el suministro de agua tanto para la población como para el funcionamiento continuo de la vía interoceánica.
El administrador de la ACP, Ricaurte Vásquez, ha enfatizado que cualquier solución relacionada con proyectos hídricos debe priorizar la situación de las personas afectadas. En este sentido, la ACP ha iniciado un proceso de diálogo abierto con las comunidades cercanas al río Indio, basándose en un censo detallado que identifica a las personas y propiedades que podrían verse impactadas por la construcción del embalse.
El plan, con un valor estimado en cerca de 1,500 millones de dólares, ha sido considerado de alta prioridad por parte de la ACP. Se prevé que su ejecución aliviará la carga sobre los lagos actuales que suministran tanto a las plantas de tratamiento de agua del área metropolitana como al sistema de esclusas del Canal, que requiere agua dulce para funcionar. Asimismo, se anticipa que creará más de mil puestos de trabajo directos durante el período de construcción.
No obstante, la iniciativa ha despertado inquietudes en las comunidades locales, quienes han manifestado preocupaciones sobre el efecto ambiental, las compensaciones por desplazamiento y la claridad en la implementación del proyecto. La ACP ha respondido garantizando que el proceso de desplazamiento se efectuará de forma ordenada, equitativa y clara, respetando los derechos culturales y sociales de las comunidades impactadas. Se ha fijado un plazo de 12 a 18 meses para la preparación conjunta del Plan de Desplazamiento y Restablecimiento de los Medios de Vida, sin presiones sobre el comienzo de las acciones vinculadas al desplazamiento.
El embalse de Río Indio se perfila como una solución completa al desafío de agua en Panamá, incrementando la capacidad de almacenamiento del recurso hídrico y preparándose para posibles sequías. La ACP ha indicado que más de la mitad del agua que recibe la ciudad de Panamá proviene de los lagos incluidos en el sistema del canal, como Gatún y Alhajuela. Por ello, un nuevo reservorio ofrecería más recursos a las plantas potabilizadoras y disminuiría la presión sobre la ruta interoceánica.